X. Cuatro poemas, una costumbre

       Al igual que el de la entrada "Sin comentarios", los siguientes cuatro poemas también fueron escritos a los 16 años e inspirados por el mismo chico, e ilustran una de mis antiguas malas costumbres más arraigadas: la de enamorarme de hombres emocionalmente ambiguos y no disponibles.

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INVIERNO


Lluvia afuera y adentro

En tu cielo y en el mío

Tu sol quedó en su bolsillo

y tú te quedas con el mío

Ella capturó tu sueño

Ella te dejó al vacío

Tú, tornado en mi invierno

El silencio traga mi aullido

Y llanto, lluvia y grito...

todo sepultado en mi pecho

para que creas que sobrevivo


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Elements Of This World, CC BY 2.0 <https://creativecommons.org/licenses/by/2.0>, via Wikimedia Commons


SIN TÍTULO


Pared transparente

Me ahoga lo que encierra

Líquido maldito que te envenena

Me bebo tu mirada

con su imagen impresa

y con ese amargo sabor a tristeza


El antifaz en su rostro

su rostro en tus adentros

tus adentros sangrando

y me trago sus reflejos


Me trago mis lágrimas,

bebida tan amarga

Ella tras su antifaz

permanece tan ciega


Y ese brebaje entero

me pasa en la garganta...

Mi sonrisa lo sella.

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Sérgio Valle Duarte  Wikidata has entry Sergio Valle Duarte (Q16269994) with data related to this item., CC BY 3.0 <https://creativecommons.org/licenses/by/3.0>, via Wikimedia Commons
     

LA BURBUJA


Es una burbuja maldita

La membrana hecha de nada

pero encierra tan bien al todo,

que todo parece inexistente


(Adentro todo lo que nos liga

Afuera la indiferencia hiriente

Cómo quisiera reventarla

Cómo quisiera tenerte)

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EL SECRETO


Miradas envueltas en paños

Pensamientos gemelos ocultos

Veo en el negro total

Intuyo sonidos que no oigo


Germina en la sangre el secreto

Lo oigo bajo tu pecho

Lo oyes en mis adentros

Oímos en el silencio

y deja de ser secreto

Se convierte en confesión

absorbida por el miedo


Pero la puerta se entreabrió

En tus iris, en los míos

Cierra los ojos, estoy desnuda

Estás desnudo tras esa puerta

Pongámonos la venda

de hilos de indiferencia


El monstruo crece, me aterra

Prefiero la ceguera

Prefiero la sordera

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